sábado, 17 de diciembre de 2011

En La Cueva Del Lobo - by Jordi (Ilegal Return)

Supongo que a estas alturas todos conoceréis el blog Ilegal Return, para los que lo desconozcáis es uno de los mejores blogs que nos podemos encontrar en castellano, sobre la NFL. Su autor es Jordi, un grandísimo aficionado al Football, con el que últimamente he intercambiado opiniones, como no podía ser de otra manera, sobre Tim Tebow. Tras leer la gran entrada de Bronco me pidió que si podría poner una réplica en la que expresaría su opinión, como podéis imaginar, totalmente opuesta a la de Bronco y la mayoría de vosotros incluida la mía. Dentro de esta gran familia que deberíamos ser los aficionados al Football en este país, deberían tener cabida todas las opiniones y argumentos, siempre desde el respeto, y en que cualquier tipo de pique al rival sea siempre hecho desde el humor. Últimamente, no se si por el caso Tebow, todo esto se está perdiendo. Yo mismo mandé un que "Os Den" harto de discusiones que no llegaban a ningún sitio. No olvidemos que todo por lo que nos gusta este deporte y que tanto nos gusta pregonar, a las primeras de cambio olvidamos para dejar paso a aquello de lo que intentamos apartarnos, que nos es otro que el estúpido forofismo que se da en el mundo del fútbol, en el que se ha llegado a un punto en el que un padre no pueda acompañar a su hijo al estadio rival con la camiseta de su equipo favorito. Estúpidos habrá en todos lados me diréis, pero intentemos no subir el número incorporándonos a dicho grupo. espero que esto sirva de ejemplo y demostremos que de verdad los aficionados al Football, lo somos, y que ésta gran pasión nos una antes de que nos distancie del todo.

Aquí os dejo con Jordi:



EN LA CUEVA DEL LOBO
He tenido ocasión de cruzar comentarios con Kike, autor de este blog, y me alegra haber comprobado que, aún en trincheras opuestas, hablando, la gente se entiende. Animado por tal experiencia y convencido de que no ha sido la típica excepción que solo confirma la regla, me apresto a meterme en esta “cueva del lobo”, convenientemente equipado con mi chaleco antibalas, para replicar el artículo de Bronco. Desde mi particular punto de vista, allá voy!.
ES PRONTO PARA VALORAR A TEBOW. Nos hemos acostumbrado todos a quemar jugadores con más facilidad con la que nos cambiamos de calcetines. Vemos el primer minuto de cada quarterback y lanzamos nuestra sentencia: “Tebow no vale como quarterback, Blaine Gabbert es un incapaz, Andy Dalton sería un Tom Brady si tuviera mejor equipo y Cam Newton llegará a ser the number one”. Sí, es injusto. Pero seamos sinceros, no es algo que sólo afecte a Tim Tebow, sino una práctica universalmente extendida. Así que no deberíamos quejarnos cuando el aludido es el fullback y no cuando el señalado es otro. Por otra parte debemos de reconocer que todos somos juzgados. Y no en el amplio margen de una temporada sino día a día, hora a hora. En el trabajo y en nuestras vidas, nuestras acciones son valoradas continuamente. Nadie nos dice: haced lo que queráis y dentro de unos meses lo valoramos!. No se le dio esa oportunidad a Kyle Orton, nadie clamó para que condujera el ataque de los Denver hasta finalizar la regular season y luego juzgar!. Quien piense que por llamarse Manolo, Juan, Carlos, o Tim -por increíble que nos parezca-, va a escapar de ser criticado cuando lo merezca –o alabado cuando se lo gane-, es que no ha entendido de qué va el negocio; si ni siquiera los Rodgers, Bradys o Mannings se salvan de una colleja cuando no juegan bien, ¿en base a qué razonamiento exigimos que Tebow sea una excepción?.
Tebow juega de quarterback en un equipo profesional de la NFL y, por tanto, está expuesto a la crítica, a la valoración, al juicio de todos, si hace falta minuto a minuto, empezando por sus propios aficionados, pasando por los técnicos, siguiendo por el ‘cagadubtes John Elway, continuando por el resto de opinadores profesionales y terminando por el último de los blogueros en el lugar más perdido del mundo. Acabo de descubrir para algunos la sopa de ajo.
EL PAPEL DE LA DEFENSA. En realidad Bronco asume que parcialmente está de acuerdo con el reconocimiento que la defensa naranja debe de tener, así que no hay mucho más que añadir salvo que señala que esta eficiencia defensiva tiene que ir acompañada de un ataque que resuelva las situaciones. En efecto, es lo que he predicado cuando se atribuyen las victorias sobre los hombros de Tebow: la victoria tiene muchos padres pero la derrota es huérfana. En la estrategia de Fox cada uno debe cumplir su papel: reducir el partido a anotaciones bajas y llegar al rush final con opciones a la victoria. Y ahí Tebow es un tiburón con instinto asesino. Pero si la base falla, y la base es la defensa, el equipo se desploma como así ocurrió contra los Lions. La defensa juega mejor, semana a semana, ha recuperado a jugadores de importancia y su importancia en el balance del equipo, manifiesta.
 TEBOW NO ES UN QUARTERBACK. Hace algunas semanas leí en este blog un artículo en donde se hablaba de la incapacidad de los fans NFL a aceptar roles que no correspondieran al quarterback prototípico. Y nos lo dicen a nosotros que, año a año contemplamos y disfrutamos con el primero de los pocket passers clásicos hasta el último de los runners como Vick o Newton!. Así que no, vayan olvidandose de ese talibanismo solo utilizado como argumento vacío. Aquí se admite todo y esa idea, presentada como argumento, es tan falaz como malintencionado. 
Tebow es un quarterback. Juega en esa posición y así ha llegado a la NFL, por si alguien lo ha olvidado, una de las ligas más profesionalizadas, especializadas y exigentes del planeta. Otra cosa bien distinta es la valoración que de su juego se haga. Por el microscopio del análisis pasan los profesionales, quieran o no y todos ellos son juzgados bajo los mismos criterios. Tebow tiene un brazo potente y una capacidad de correr fascinante. Nunca lo hará con la agilidad de Vick –nadie se lo hay pedido que se sepa-, tampoco con la visión de Newton y cualquier comparación es odiosa. Tebow tiene su particular estilo, muy parecido a cómo se movería –por tipología-  un fullback y de ahí parte la broma. A Dios gracias ha dejado de ir al choque en sus carreras. No creo que nadie se alegrara al ver como, en cualquier choque, ese chaval quedara lesionado.
Pero seamos sinceros. De un quarterback se esperan ciertas características. Podemos perdernos en consideraciones secundarias pero los criterios siempre han sido muy claros y, en realidad, es la parte más difícil en la transición que cualquier quarterback tiene que recorrer desde la universidad hasta la liga profesional. En el caso de Tebow –y de muchos otros-, sufrirá al ver como no siempre su equipo adoptará una posición de shotgun cuando quieran jugar al pase o cuando descubrar que sus carreras serán más difíciles de conseguir y a un precio más alto. Por el mismo método que los running backs son juzgados por las yardas de carrera que acumulan, o la facilidad con leer los gaps o rectificar sus rutas o los wide receivers, recepción, agilidad y velocidad o, los linebackers, capacidad de asaltar al quarterback rival y cobertura, etc. Todos ellos pueden constituirse en líderes del equipo, inspirarlos y jugar la baza psicológica. Pero la parte central, ese bosque que algunas veces puede quedar oculto tras algunos árboles, está muy definida. Creo que todos reconoceremos que Tebow, teniendo un brazo potente y siendo una arma mortal en situaciones especiales del juego, exhibe carencias muy importantes; entre las más destacadas: falta de precisión, escasa lectura de las defensas rivales. Y eso no es ni ser un reaccionario, un intolerante ni un anti-Tebow; cuando uno contrata a un alero espera que, en primer lugar, tenga buen tiro. Si además aporta rebote, velocidad o liderazgo, mucho mejor.
Significativo es que hasta hace poco, Tebow no entraba en algunas clasificaciones, no porque volcasen sobre él todo el odio contenido, no porque creyeran excesiva la exhibición que de sus creencias religiosas hace (sino queremos mezclar deporte con política, ¿por qué sí hacerlo con la religicón de cada uno?), porque lo odiaran o lo temieran, sino simplemente porque no alcanzaba el número mínimo de pases exigidos –no recuerdo si intentados o completados-, como para figurar en ellas. Ser el trigésimo entre treinta y cuatro quarterbacks es un frío pero claro dato. Más significativo aún es ver como la estrategia de John Fox se ha ajustado a la realidad, decidiendo que cuantas menos jugadas de pase se den a Tebow, mejor para todos. ¿Qué pensaríamos de un quarterback llamado Phil McCallahan si, apenas llegara al 50% de pases completos o cuando gran parte de sus partidos no superase el 25%?. Seguramente muchos opinarían que o bien no tiene nivel para jugar en la NFL como quarterback, o que está muy lejos aún del nivel medio; ¿verdad?. Que cada uno que llegue a su propia conclusión. Repito, estoy hablando de las características básicas que un quarterback debe tener con independencia de su estilo y su influencia sobre la moral de sus compañeros.
En las últimas semanas han aflorado todo tipo de estadísticas comparativas. Que si el propio Elway registró peores números en su primera temporada, que si el otro aún fue mucho peor, etc. Me parecen bien estos datos porque nos enseñan lo que al principio comentábamos: un quarterback necesita crecer y evolucionar. La parte engañosa es que eso puede inducir a alguien a pensar que, indefectiblemente, cualquier mal inicio de carrera de un quarterback acabará siendo un jugador del nivel de los mencionados.
Nunca jamás he dicho que no podamos ver en él, dentro de unas temporadas, a un puto crack. En este sentido no comparto la seguridad todos expresáis. Una confianza que ni siquiera John Elway tiene. Quizá lo más probable es que Tebow acabe siendo un quarterback, ninguna estrella, pero con una peculiar combinación de cualidades que su equipo sepa exprimir. Yo no creo que pueda ser un buen quarterback para una franquicia como los Broncos. Deseo para ellos algo más. De hecho, mi puerta siempre está abierta a ello. Pero hoy por hoy, la realidad fría, de Tebow es la que es. Solo el tiempo lo juzgará finalmente.
 CONCLUSIÓN. Tebow es lo más grande que ha pasado esta temporada NFL. No es que sin él nos hubiéramos aburrido porque a buen seguro que estaríamos discutiendo sobre otros temas igualmente interesantes. Pero la buena controversia deportiva siempre es buena si está correctamente enfocada. Así que, sabiendo que hoy me toca jugar en terreno hostil, espero que si bien no se compartan, en todo caso sirva para exponer otro punto de vista. Dudo que, de un tiempo a esta parte, no estemos ante la temporada en la que los Denver Broncos no hayan captado una gran parte de la atención de los aficionados. Gente a la que antes le importaba un pimiento lo que sucedía en la ciudad de las Rocosas, ahora se pega ante el televisor o el portátil para ver a ese tipo que ha revolucionado la regular season.
El problema nace cuando se forman grupos emocionales, solo dispuestos a menospreciar al contrario, a reírse de él y, como es habitual en estas situaciones, a evitar el debate sereno. Como hablaba con Kike, de los “pros”, los “anti” y los “itis”. Seguro que mucha gente se ha choteado de los pases de Tebow, pero no lo silenciemos, con igual fuerza han sido contestados por los que han querido presentar ya a Tebow como la quintaesencia de un “nuevo quarterback” que cambiaría la historia de la NFL y, en consecuencia, a chotearse de aquellos que intentábamos exponer unos argumentos razonados, equivocados  o no. Y ya tiene tela para alguien como yo, que viví aquella final Montana vs Elway con sabor agridulce (por la victoria de los 49ers pero también por el destrozo que sufrieron los Broncos) y mi simpatía por los Broncos tenga que recibir algunos emails insultantes.
En realidad, la carrera de Tebow me importa tanto como la de otros tantos quarterbacks de la liga. Ni me sentiré “ganador” si se confirman mis primeras impresiones, ni “perdedor” si el chaval acaba triunfando. Eso sí, hagamos un ejercicio de realismo y asumamos que si la aventura de Tebow fracasa, no busquemos otras justificaciones como tácticas, odios, receptores de poco nivel, técnicos incompetentes; él será el primer responsable. Con todo, como siempre he dicho, si llega el caso de dedicarle mi mejor post, lo haré gustoso. Rechazo las etiquetas y opino únicamente en función de lo que sea capaz de hacer en cada momento. Los Denver Broncos se ganaron hace tiempo un rincón en mi corazón, con o sin Tebow. 

3 comentarios:

  1. Pequeños apuntes sobre tu escrito:

    En el primer párrafo: Acaso tu no defiendes a tus jugadores de tu equipo? Yo sí. Como tú dices, me da igual se llame como se llame (en su momento defendí a Orton). Leer a diario críticas a Tebow y llamarle FB (me parece hasta ofensivo) no lo puedo defender?


    En el 2º párrafo del primer punto... Eso también os lo podéis aplicar los bloggeros, no va solo por ti, pero quedáis expuestos a las críticas al compartir vuestras ideas/escritos.

    Sobre lo del QB, más o menos estoy de acuerdo con tu opinión, nada que objetar.

    En la conclusión creo que te dejas una cosa, Tebow arrastra a masas, lo que hace que cada movimiento que haga se multiplique por mil. En España el caso sería el de Messi/CR7. Si no eres fan de ellos te cansas.


    Saludos, y gracias por compartir tu punto de vista

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  2. Alguna puntualización:
    1. No creo que los que llamamos al principio a Tebow FB lo sigamos haciendo para ridiculizarle. Tipológicamente lo es, y cuando va al choque juega como tal.
    2. La realidad es que los Broncos dependen más de su defensa que de Tebow. Salvo contra Minnesota, el resto de victorias se ha sustentado en una anotación baja del contrario.
    3. "Arrastra multitudes". De acuerdo, pero quienes le juzgamos en España no somos multitudes, y debemos atenernos exclusivamente a criterios que tengan que ver con el football.
    Muchas gracias por este magnífico blog; desde hace tiempo lo sigo, y en las últimas semanas ha subido muchísimo su nivel. Un saludo.

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  3. Buenas Jordi, en primer lugar, gracias por tu réplica. En realidad estoy de acuerdo en casi todo lo que has escrito.
    Obviamente esta prisa para juzgar y sentenciar a jugadores no se aplica exclusivamente a Tebow, sino a todos, y me parece igual de mal en todos los casos.
    Totalmente de acuerdo contigo sobre Orton. Hace unas semanas publiqué una entrada en este blog en la que, entre otras cosas, me quejé de lo mal que se ha tratado a Orton en Denver.
    Finalmente, el hecho de que Tebow pase poco puede interpetarse como que no se confía en su hablididad como pasador. Yo creo que, en cierto modo, se le está "protegiendo". Sin pararme a mirar estadísticas, juraría que Roethlisberger pasó lo mínimo y necesario en su año de rookie. Creo que en cierta manera aquí se está haciendo algo similar. Evidentemente, nunca ganaremos una Superbowl con un QB que no complete más del 50% de sus pases, o que sea incapaz de enlazar 4 o 5 pases seguidos fuera del último cuarto. La principal tarea de un QB es pasar, y si no pasas bien, da igual que hagas todo lo demás perfecto, no sirves y punto. Simplemente espero que, con el tiempo, Tebow crezca y mejore en este aspecto y, si no lo hace, pues podremos concluír que no es el QB que nuestra franquicia necesita.
    Un saludo.

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